¿Cómo influye en la salud mental el mantener un peso y composición corporal saludable?
Un 74,2% de las personas mayores de 15 años en Chile tiene un exceso de peso (sobrepeso u obesidad), y un 86,7% de la población nacional es considerada como sedentaria, estos datos son de la última encuesta nacional de salud 2016-1017 (ENS, 2016-2017), es decir, pre pandemia, pre cuarentenas, lo que hace suponer que estos datos sólo presentarían un alza si se hiciera una nueva medición.
- La práctica de ejercicio físico no solo beneficiará físicamente a quien lo realice, sino que también reducirá el riesgo de depresión y deterioro cognitivo.
- El ejercicio puede ayudar a tratar la depresión con tasas de respuesta comparables a los medicamentos antidepresivos y la terapia cognitivo-conductual».
- La afirmación anterior es, sin duda uno de los mejores argumentos que tenemos los profesionales de la actividad física y salud para todos aquellos que preguntan: ¿por qué el ejercicio es tan beneficioso en personas con síntomas de depresión?
- Una desregulación del sistema inmunológico y la inflamación persistente son características inherentes del trastorno depresivo mayor (TDM) recurrente.
- Las citoquinas proinflamatorias pueden disminuir los niveles de serotonina en el cerebro y, en general, alteran la neurotransmisión y la señalización cerebral en regiones del cerebro, importantes para la regulación de las emociones y el estado de ánimo.
- Los pacientes con depresión a menudo tienen altos niveles de citoquinas proinflamatorias y comportamientos similares a los pacientes depresivos, que pueden mejorarse con el ejercicio.
- Varios estudios han demostrado que el ejercicio físico puede traer beneficios como terapia adyuvante e individual en el tratamiento del TDM o ser una estrategia para la prevención del TDM.
- La obesidad y depresión son patologías bastante comunes, ambas causan problemas significativos de morbilidad y mortalidad y tienen un impacto decisivo no sólo en la salud y el bienestar de las personas, sino también en los aspectos socioeconómicos y de gastos de salud.
- La evidencia reciente sugiere complejas reacciones bidireccionales entre la obesidad y la depresión, lo que puede explicar su crecimiento similar y paralelo.
La incidencia de depresión en personas con obesidad es cercana al 30%, una tasa que es significativamente más alta que la medida en población general.
- En general, el tamaño del efecto es mayor si consideramos la obesidad alta (clase III IMC >40) en comparación con la aplicación del índice de IMC >30 que define la obesidad, aunque es positivo, son menos fuertes, y no siempre son significativos para el sobrepeso (IMC 25-30).
- Se ha demostrado que el sexo modera la asociación depresión-obesidad, ya que fue más fuerte en mujeres que en hombres.
- Esta y muchas otras investigaciones respaldan tanto la relación existente entre ambas patologías como la importancia de mantenerse físicamente activo y mantener un peso corporal saludable.