La exposición prolongada a los rayos ultravioleta durante la temporada veraniega puede conllevar una serie de riesgos oculares, incluyendo cataratas, degeneración macular y pterigión (una membraba que crece sobre la córnea). Además, puede ocasionar fatiga visual, conjuntivitis, queratitis y envejecimiento prematuro de la piel alrededor de los ojos, entre otros problemas.
Cabe señalar que no solo los adultos deben usar lentes de sol; los niños también, sobre todo considerando que sus ojos son más sensibles a la luz solar y los rayos UV pueden provocar daños a largo plazo.
¿Por qué usar lentes de sol?
El Dr. Fernando Sánchez, Oftalmólogo de COP, señala que usar lentes de sol en verano es importante por varias razones:
-Protección ocular: los lentes de sol con protección UV ayudan a proteger los ojos de los rayos ultravioleta del sol.
-Reducción del brillo: este tipo de lentes reduce el brillo del sol, lo que ayuda a mejorar la visibilidad, lo cual es muy útil cuando se está al aire libre en actividades como la conducción, el deporte o la playa, donde el reflejo de la luz solar en superficies como el agua, la nieve o la arena puede ser molesto e incluso deslumbrante.
-Prevención de la fatiga ocular: el uso de lentes de sol puede ayudar a prevenir la fatiga ocular causada por la exposición continua a la luz solar intensa. Esto puede reducir el cansancio y la irritación de los ojos, permitiendo una visión más cómoda.
-Protección de los párpados y la piel alrededor de los ojos: Los lentes de sol también protegen los párpados y la delicada piel alrededor de los ojos de los efectos dañinos del sol, previniendo quemaduras solares y la aparición de arrugas prematuras y otros signos de envejecimiento cutáneo.
¿En qué fijarse al comprar lentes de sol?
-Protección UV: asegurarse de que las gafas de sol ofrezcan una protección del 100% contra los rayos ultravioleta, para lo cual es recomendable buscar lentes que tengan un sello o etiqueta que indique su nivel de protección UV y sean comprados en lugares establecidos y autorizados.
-Polarización: Los lentes polarizados reducen el resplandor y mejoran la claridad visual, especialmente al estar expuesto a superficies como el agua, la nieve o la carretera. Si se pasa mucho tiempo al aire libre en estos entornos, es una opción a considerar.
-Ajuste y comodidad: los lentes de sol deben ajusten bien al rostro y ser cómodos de llevar.
-Tamaño y cobertura: las gafas de sol tienen que cubrir adecuadamente tus ojos y protejan la piel alrededor de ellos.
-Calidad de los materiales: es importante que los lentes de sol estén hechos de vidrio óptico, policarbonato u otros materiales resistentes a los impactos y ralladuras. Las monturas también deben ser duraderas y resistentes.